martes, 20 de febrero de 2018

El joven genio Steve Lacy



Steve Lacy tiene 19 años y compone todas las bases de sus canciones con un Iphone. En su corta carrera ya produjo a Kendrick Lamar y J. Cole (siempre con el teléfono). 

Cuando Lacy estaba en la secundaria se unió a la banda The Internet, que ya sacó tres discos y está grabando un tercero. El último fue nominado a un Grammy. 

También editó un EP llamado Steve Lacy’s Demo.

Hace una semana lazó Crush, EP de Ravyn Leane que produjo completamente y donde también aporta su voz.

Curiosamente, Steve Lacy no siquiera página de Wikipedia.

En este espacio es considerado un joven genio. 



miércoles, 14 de febrero de 2018

La banda sonora de Black Panther es el mejor disco del 2018 (hasta ahora)


Las reuniones de las grandes estrellas de la música no suelen producir obras memorables. Son más bien un grupo de millonarios congregados por causas humanitarias que le son muy lejanas a su realidad de alfombras rojas: Bangladesh, Haití o cualquier otro país donde el gobierno de los Estados Unidos planee una intervención civil. Primero mandan a Bono y a Phil Collins para ablandar el terreno y después entran con la Constitución.

Dios bendiga Norteamérica. 

Todo suena demasiado armónico y aburrido, música diseñada para gustar. Es ese sonido “Playing For a Change”, banda sonora para la gente que quiere demostrar que sabe algo, pero en realidad no entiende nada. Un brasileño con una mandolina, un marroquí con una trompeta y un filipino con dos tambores tocando Stand by me a miles de kilómetros de distancia. ¿Eso se supone que es lo bueno?

Kendrick Lamar (considerado DIOS en este blog) acaba de publicar la banda sonora de una película que aun no se ha estrenado: Black Panther. Y para eso juntó a algunos de los artistas de hip hop y R&B más importantes del momento. El resultado, en contra del pronóstico inicial, es genial. 

Es que Black Panther no tiene intenciones de agradar ni dar un ejemplo humanitario. Por el contrario, y como sucede con todo lo que hace KL, el objetivo es incomodar: poner de manifiesto lo difícil que es ser negro en Estados Unidos, incluso siendo un negro rico y famoso.


Desde hace días suena sin parar. 



lunes, 12 de febrero de 2018

REJJIE SNOW - MON AMOUR




Hubo algún momento en que el rap era la manifestación artística y social de un grupo de jóvenes negros pobres y marginales de New York. Con sus letras explícitas contaban al mundo la dura realidad de su vida cotidiana en las épocas de Ronald Reagan, el crack y los asesinatos. 

Aquello fue cambiando con el paso de los años. Lo que pasó, en pocas palabras, es que los negros han ido ascendiendo socialmente y ya no hace falta ser un gangster para poder rapear sin prejuicios. Kanye West podría ser el mayor exponente de este cambio: hijo de un periodista y de una profesora universitaria, su “karma” era haber dejado la universidad para dedicarse a hacer música. 

Después de esta puerta abierta por Kanye, el rap de clase media fue cruzando fronteras hasta llegar a todas las grandes urbes del mundo.

Un día llegó a Irlanda. 

Yo ni siquiera sabía que había negros en Irlanda. 

Rejjie Snow también acaba de dejar la universidad para probar suerte como músico. El 18 de enero sacó un disco en dos partes: el 22 de enero nos regaló Dear Annie Part 1 y en la última semana lazó Part 2. La estrategia de marketing es buena: ya pocos tienen tiempo de escuchar un disco entero, así que mejor hacerlo por partes. Pero más allá de la anécdota comercial, Rejjie incursiona en un rap fusionado con la música pop moderna que por momentos toca el cielo. Hace acordar a Massive Attack y esa mezcla de pop oscuro con trip hop. 

Rain, Egyptian Luvre, Annie… no puedo decidirme cuál es la mejor canción de todas.


Elegí Mon Amour por ese teclado bailable del inicio, que hace imposible quedarse quieto en el lugar. Cantan en francés, rapean en inglés, lo produce un sueco. En esta gran aldea global que estamos viviendo a veces se junta la gente adecuada y hace algo de magia.