miércoles, 1 de julio de 2009

Money for nothing



1.

Tifi Rex es una canción hermosa. Sus autores son Los Reyes del Falsete, banda de Adrogué (Provincia de Buenos Aires). Escuché todos sus temas y, honestamente, este es el único destacable. La canción repite algunas ideas y melodías del primer rock argentino, el de Nebbia y García. Pero las épocas han cambiado. La grabación es casera. El grupo es totalmente desconocido para el grueso de la población. La letra no tiene mayor sentido. Parece un experimento lúdico incitado por la marihuana: hagamos algo onda Pedro y Pablo. Dos pibes en un departamento bajando desde Taringa la historia del rock nacional en una carpeta del escritorio de su PC. El ingenuo idealismo de los sesenta trocado en un nihilismo nostálgico, 40 años después. No deja de ser conmovedor. Tifi Rex me gusta porque, muy en el fondo, es una canción vacía. Y el vacío no está exento de una belleza algo siniestra.

2.

En algún momento pensé en trazar una comparación entre Tifi Rex y el gobierno de Kirchner, que también es un setentismo vaciado de contenido, y la manera en que la canción era un óptimo reflejo de nuestros días. Sin embargo, en vísperas de las elecciones, creí con razón que eso sería hacerles el juego a los horrorosos integrantes del PRO, los nefastos Macri, Michetti y De Narváez, y me arrepentí, porque prefiero cualquier cosa antes que esos nuevos empresarios que pregonan el fin de la política. La idea de no confrontación y apolitización de la nueva derecha está basada en el proyecto de que la sociedad toda se vuelva una suerte de museo estático donde los pobres se resignan a su condición y los demás, la gente bien, se dedica a disfrutar las mieles del progreso. Como he dicho en el posteo anterior, la idea de fin de la historia esconde algo profundamente perverso. Equivale a poner a todo un sector de la sociedad del otro lado de un vidrio polarizado.

3.

Las elecciones pasaron. A los pocos días escuché las declaraciones del jefe de campaña de De Narváez, un ecuatoriano cuyo nombre felizmente he olvidado.

Nosotros apuntamos a un electorado joven, que no sabe lo que es la Guerra Fría, ni conoce a Perón, ni sabe porque cayó el Muro de Berlín. Se trata de una nueva política. Mira los discursos de Kirchner. Es aburrido. Es la vieja política, aburrida.

El momento en que la política es absorbida por el entretenimiento marca, seguramente, el fin de algo, algo que quizás los historiadores del futuro sabrán precisar con mayor certeza. Yo, mientras tanto, observo con estupor cómo el colorado imita a su imitador y de a poco va destruyendo la Historia.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

el posteo es mio.

gg

EL TIFA 666 dijo...

jajajajajajjajajajajajaja
no paro de sorprenderme encontrando este tipo de posteos
yo soy tifi rex (baterista de los reyes) realmente nosotros no somos tan fanaticos del rock nacional onda pedro y pablo, mas bien de viejas locas y los brujos
nos sentimos terriblemente halagados por los comentarios y nos gusta y causa gracia que cada uno flashee lo que quiera con nuestros temas
dentro de poco sale nuestro primer disco

un abrazo grande